Desnudos frente al San Juan polar



Mi corazón construyó el campamento base a 8000 pies de altura, cuando el invierno era sólo el filo del lomo que arrancaba de tu piel para comerte y sobrevivir, hicimos de las lágrimas ventanas de carpintería barata para poder ver el sufrimiento que había en los demás y nos lavamos los ojos con pólvora para estallar al mirarnos en esta noche de San Juan polar.

Desnúdate, necesito que me abraces apreta hasta que me estalle la cabeza y pon una sandia en su lugar, coge un bate y luego batéala para que explote y te llenes de rojo y pepitas te aconsejo que no te eches rimel.