Méteme los dedos hasta la garganta y dibuja en ella a tu boca comiéndosela. Abrázame en esa arcada y no me sueltes, córtame en estrellas como los copos de nieve, ensúciate las manos con mi carne, mece el cuchillo sobre mi piel, demuéstrate a ti misma que sabes dar los golpes de deshuesar.
Ese momento en que te das cuenta que no te gustan los masajes sino los arañazos en la espalda....
Ese momento en que te das cuenta que no te gustan los masajes sino los arañazos en la espalda....