He tratado de inmovilizar la luz del flash de tu cámara en una lazada de cowboy lo he hecho para dejarte creer en planes B y vanas alternativas, he tratado de cazar tu último aliento con mi suspiro como si fuera un cazamariposas, he quemado la hierba muerta de alrededor de tus pies para que las llamas te ayuden a alzar el vuelo, pero me resigno a exhumar nuestros ídolos, nuestros símbolos, me niego a ahorcarme con tu tirante caído del hombro o desde el salto del ángel de tus pestañas, cuidaré lo que me dejes como si fuera la paz que nunca logré contigo.
Nunca podrás vencer las batallas que perdimos, llevas en los lunares la pólvora con la que me fusilaste y aunque intentes usarme de colador para separar la paja de tus lágrimas, jamás lo conseguirás.
Nunca podrás vencer las batallas que perdimos, llevas en los lunares la pólvora con la que me fusilaste y aunque intentes usarme de colador para separar la paja de tus lágrimas, jamás lo conseguirás.